La medida ha sido anunciada tras las últimas polémicas acontecidas en la parroquia del municipio marmenorense.
Ser cura de pueblo es siempre complicado. Hay que lidiar con los feligreses, la administración, eclesiástica o no, la diócesis... Y contentar a todo el mundo es literalmente imposible. En Los Alcázares, Región de Murcia, cansados de esta situación de conflicto, han encontrado una solución para que futuros párrocos tengan mayor legitimidad y autoridad moral a la hora de tomar decisiones que puedan resultar polémicas: hacer unas elecciones para cura.
La medida resulta sorprendente por novedosa, pero según el portavoz de la plataforma promotora de la idea, llamada "Elijamos cura", la idea no es nueva. "Al fin y al cabo estamos en un país democrático, en el siglo XXI, y la participación ciudadana es un valor en auge. La idea nos surgió de la película 'Amanece que no es poco', donde eligen de todo, desde puta a policía, y nos dijimos que nosotros podríamos elegir cura. Y ahí estamos".
Las reticencias a la medida son muchas y llegan desde muchos ángulos. Desde la propia diócesis no lo ven claro, pero por no parecer antidemocráticos, lo aceptan. Otro curas de otras localidades lo ven una barbaridad, "pues no es así como Dios manda estas cosas", dicen. Entre los feligreses hay de todo, posturas a favor de la profundización democrática y y en contra de la intromisión de la plebe en cosas de Iglesia.
El gran problema de todo este asunto se plantea en la elaboración del censo electoral. Aquí no hay Dios que se ponga de acuerdo. Desde quien pide que solo voten feligreses censados con más de un 50% de asistencia a misa durante el año, lo que reduciría el censo a cuatro gatos, a otra propuesta que pide que todo aquel bautizado pueda votar el día de las elecciones, "puesto que para otras cuestiones la Iglesia siempre nos cuenta", afirma un bautizado anónimo. Entre ambas propuestas las hay intermedias: que voten solo quienes han hecho la comunión, otra que pone límite en la confirmación y otra que pide que todo aquel que pueda rezar el Padre Nuestro debe poder participar. "Pero el nuevo, nada de descreídos desactualizados".
La polémica está servida. Y los partidos políticos ya cortejan a los posibles candidatos para que vistan ropa azul, roja, naranja o morada. "Lo nuestro ya es por vicio, no por otra cosa. Vemos unas elecciones y allá que vamos".
Alea jacta est. In nomine Patri et fili etc votanti. Amén.
(recuerda.que.esto.es.una.broma)
